Chile y la OCDE
| Autor | Clara Leonora Szczaranski Cerda |
| Páginas | 221-243 |
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1. EL CAMINO A LA OCDE
La OCDE –con sede en París, un staff de 2.500 personas y un pre-
supuesto de 342,9 millones de euros (2008)– surge de la Orga-
nización para la Cooperación Económica Europea, destinada a
implementar la ayuda americana y canadiense a Europa después
de la Guerra en el marco del Plan Marshall. En 1961 se sustituyó
esa entidad por la OCDE, dirigida a objetivos más amplios: cons-
truir economías estables, promover la economía de mercado,
expandir el libre comercio y contribuir al desarrollo tanto de los
países industrializados como de aquellos en desarrollo. La OCDE
cuenta entre sus miembros a más de 30 países que comparten
los principios de la economía de mercado, el concepto de una
democracia pluralista y del Estado de Derecho constitucional
y respetuoso de los derechos humanos. Inicialmente 20 países
firmaron la Convención en 1960, y otros 10 se incorporaron des-
pués. El penúltimoen ingresar fueEslovaquia, en el año2000. Y,El penúltimo en ingresar fue Eslovaquia, en el año 2000. Y,
ahora, en enero de 2010, ha ingresado Chile.
En virtud del artículo 1º de la Convención constitutiva de la
OCDE, firmada el 14 de diciembre de 1960, en París, y que entró
en vigor el 30 de septiembre de 1961, la Organización para la
Cooperación y el Desarrollo Económicos (como dice la versión
en inglés), u Organización para la Cooperación Económica y el
Desarrollo (como reza su nombre oficial en francés), tiene como
objetivo promover políticas destinadas a lograr la más fuerte
expansión posible de la economía y del empleo y a aumentar el
nivel de vida de los países miembros, manteniendo la estabilidad
C A P Í T U L O I X
CHILE Y LA OCDE
UN ASU NTO CRIM INAL CON TEMPOR ÁNEO
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financiera y contribuyendo así al desarrollo de la economía mun-
dial; contribuir a una sana expansión económica en los países
miembros y no miembros en vías de desarrollo económico; y
contribuir a la expansión del comercio mundial sobre una base
multilateral y no discriminatoria conforme a las obligaciones
internacionales.
Los firmantes de la Convención constitutiva de la OCDE son:
Alemania, Austria, Bélgica, Canadá, Dinamarca, España, Estados
Unidos, Francia, Grecia, Irlanda, Islandia, Italia, Luxemburgo, No-
ruega, Países Bajos, Portugal, Reino Unido, Suecia, Suiza y Turquía.
Actualmente y a través de los años han adherido: Japón, Finlandia,
Australia, Nueva Zelanda, México, República Checa, Hungría,
Polonia, República Eslovaca, Corea y recientemente Chile.
La OCDE para Chile será un poderoso referente. Es la fuentea fuente
más relevante en el mundo en materia de estadísticas compara-
das, de análisis, evaluación y diseño de políticas públicas. Es un
centro de identificación de buenas prácticas y determinación de
altos estándares. Es, a la vez, un foro de reflexión y discusión al
que accederemos para comparar experiencias con países, actores
sociales y expertos, buscar respuestas a desafíos comunes y coor-
dinar la adopción de políticas domésticas e internacionales.
En los trabajos de la OCDE, son conceptos clave: like-minded
countries (compromiso con democracia, crecimiento económico,
libre comercio, transparencia, desarrollo sustentable). Sus focos de
interés incluyen todas las áreas de gobierno con la excepción de
defensa-temas militares; especialmente, las materias económicas,
sociales, educacionales, ambientales, comerciales, financieras,
migratorias, agrícolas, laborales, analizadas desde perspectivas
multidisciplinarias. Investiga, también, los cambios sociales y las
tendencias en materia de comercio, medio ambiente, agricultura,
innovación, tecnología y educación, entre otros. Recopila, analiza
y publica datos, estudios y proyecciones económicas y sociales y,
en los hechos, la OCDE es el editor más grande del mundo de pu-
blicaciones sobre políticas públicas (250 nuevos títulos por año).
Además monitorea los avances y desafíos en materia de políticas
públicas, y mantiene un diálogo permanente con los actores so-
ciales y las principales instituciones multilaterales y ONGs.
En cuanto a la “agenda global”, impulsa la discusión y la
adopción de estándares en torno a temas emergentes, como el
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