Compraventa romana arcaica: mancipatio en los albores del capitalismo agrario - Núm. 1, Noviembre 2014 - COADUC. Revista Colegio de Ayudantes Derecho UC - Libros y Revistas - VLEX 643358453

Compraventa romana arcaica: mancipatio en los albores del capitalismo agrario

AutorCristóbal E. Robinson Leiva
CargoEstudiante de Derecho Pontificia Universidad Católica de Chile, Ayudante de Derecho Romano Prof. Dr. Patricio-Ignacio Carvajal

Ver Nota1

Cuando hablamos de compraventa, hablamos de un contrato cotidiano; versado o no, más o menos en el arte y ciencia del Derecho, sabemos de qué trata. Su base histórica es esencialmente, romana, siendo interesante su enfoque y relación al auge económico que experimentó esta civilización en el paso hacia el capitalismo agrario que la llevó al esplendor. La forma primitiva de este contrato, se nos devela en la Roma arcaica: la Mancipatio. Entonces, ¿influyó la mancipatio y su desarrollo en el desarrollo del capitalismo agrario romano, propiciando también el avance a formas contractuales más evolucionadas?

Primera parada: los orígenes de Roma. Surge la mancipatio en el contexto de vida campesina, ligada a la tierra y una economía metalizada, sin moneda acuñada. Gayo la describe en sus Institutas (I, 119) como una venta “imaginaria” de los ciudadanos romanos, “en presencia de cinco o más testigos, ciudadanos romanos púberos y además de otro en la misma condición que sostiene la balanza de cobre y se llama portador de la balanza (…)”2. Por cierto, una forma de anular ipso iurelas obligaciones de la mancipatio, era la más primitiva de las solutio, la solutio per aes et libram3 (al revés de la mancipatio, cambiando las palabras clave).

La noción de bienes mancipi y nec mancipi es inherente a la mancipatio. Surgen como bienes agrícolas (las bestias de tiro domadas por cuello y lomo, esclavos, predios itálicos y servidumbres rústicas, según Gayo II, 14) y quizás fueron bienes comunes a la gens, antes de la privatización de la propiedad; por lo tanto este contrato revestía vital importancia al ayudar progresivamente los intercambios que darían más valor y harían evolucionar el mercado a un capitalismo agrario, por la adquisición de los bienes agrícolas a través de esta mancipatio4.

Va de la mano al poder de mancipio que era prerrogativa del pater familias, elmanceps, cuando se habla del contexto de una mancipatio (o de cualquier otra adquisición ya sea por simple trato o subasta5). La mancipatio va deviniendo en esta “venta imaginaria” que postula Gayo, luego de haber satisfecho diversas necesidades económico-sociales6 (incluso como entrada a la manus del pater familias7, pero preferentemente, la venta con adquisición de propiedad) y el bronce pasa a no ser más que un “símbolo” del precio.

Como satisface esa multiplicidad de necesidades, da pie al desarrollo también de otros contratos, particularmente de los relacionados a la sponsio que deviene luego en stipulatio (tan multipropósito como la misma mancipatio pudo serlo)8. Considerando lo ya expresado sobre la contextualización en una economía metalizada, tenemos que ya en la época de la economía monetarizada (desde el s. IV-III a.C) surge la figura de la mancipatio nummo uno, en la cual al no necesitarse un precio real en barras de bronce (raudusculum) se simbolizaba el precio por una moneda en la balanza, convirtiendo a la mancipatio en un acto abstracto9, producto de la misma evolución del capitalismo incipiente que referimos. El simbolismo de la mancipatio y su multiplicidad de usos llegan a constituir una raíz del derecho sucesorio a través de la primitiva figura del testamento per aes et libram, desde la consagración misma del derecho a testar en las XII Tablas10.

En este mismo respecto de la mancipatio como piedra inicial de otros contratos, vale decir también que la futura emptio venditio, por ejemplo, adoptó buena parte de los elementos de su antecesora. Contamos la responsabilidad por evicción, la cual en caso de acaecer daba acción, la Actio Autoritatis para exigir el duplo del precio pagado, considerando una previa stipulatio duplae...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR