¿Originaria o derivada? - Núm. 175, Agosto 2020 - Serie Informe Sociedad y Política - Libros y Revistas - VLEX 847518527

¿Originaria o derivada?

Páginas8-10
¿POR QUÉ COMO CHILENO DEBO SABER ESTO?
Tener clara la naturaleza y finalidad de una
asamblea constituyente es clave para exigir y
esperar de ella resultados ajustados a las expec-
tativas y promesas generadas a propósito de su
convocatoria.
La asamblea constituyente fue concebida en un
momento histórico -en la Europa del siglo XVIII,
por pensadores como Emmanuel-Joseph
Sieyès, en el tránsito de la monarquía absolutista
confesional a la república laica- como un meca-
nismo extraordinario para enfrentar una crisis
política terminal, ante la cual las instituciones y
reglas existentes, en general, se perciben no
idóneas para satisfacer las demandas y desafíos
que la situación crítica plantea.
La constituyente puede ser originaria o deriva-
da, esto es, o revolucionaria o institucional. Es
originaria cuando sus integrantes deciden, al
margen de lo que diga la Constitución y la
legislación vigentes, que ella, además de
redactar una nueva constitución, dictará otros
actos de intervención y modificación de las
instituciones existentes, tales como el Congre-
so, la Corte Suprema, la Contraloría, el Banco
Central, el Tribunal Constitucional o las Munici-
palidades, y que lo hará antes de que se aprue-
be y entre en vigencia la nueva Constitución.
Es derivada, en cambio, cuando sus integrantes
deciden respetar la normativa jurídica vigente,
se limitan a redactar una nueva constitución y la
someten a consulta popular para su aprobación,
sin intervenir ni afectar el funcionamiento de las
instituciones ya existentes.
Es claro, según lo anterior, la importancia de este
primer tópico examinado: de que sea originaria o
derivada dependerá lo que la constituyente hará o
no, una vez instalada según el mandato ciudadano.
¿QUÉ HAN HECHO EN OTROS PAÍSES?
De acuerdo con el Informe PNUD, desde los años
40 del siglo XX hasta 2014, han funcionado nueve
constituyentes que se declararon originarias, y sólo
tres que se declararon derivadas.
Funcionaron constituyentes originarias, con des-
iguales acciones y resultados, en Italia (1947), India
(1950), Portugal (1976), Uganda (1995), Venezuela
(1999), Ecuador (2008), Islandia (2010) y Túnez
(2014). En cambio, funcionaron constituyentes deri-
vadas, también con acciones y resultados disímiles,
en Camboya (1993), Sudáfrica (1996) y Bolivia
(2009).
Dado que el contexto de cada país era particular, es
complejo afirmar en qué casos la constituyente fue
positiva o negativa. Un criterio podría ser el tipo de
régimen político a que dio lugar. Otro, la estabilidad
y eficacia constitucional e institucional que brindó
al país con la constitución elaborada. También
podría ser el grado de participación y consenso que
fue posible durante su existencia, al margen de la
perdurabilidad de este último.
Lo que sí es posible determinar, es en qué casos las
constituyentes fueron más allá de elaborar una
nueva Constitución y en qué no, en qué consistió
ese ir más allá y si fueron justificadas o no las
actuaciones adicionales.
8
WWW . L Y D .ORG
serie informe SOCIEDAD Y POLÍTICA 175

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR