Prólogo a la primera edición
| Autor | Jesús-María Silva Sánchez |
| Páginas | 9-12 |
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PRÓLOGO A LA PR IMERA EDICIÓN
Éste es el tercer prólogo que, en muy poco tiempo, escribo a sendos libros de mi querido amigo y discípulo Juan Ignacio Piña Rochefort. Hace dos años presenté su libro sobre La estructura de la teoría del delito en el ámbito jurídico del Common Law (Edit. Co-mares, Granada, 2002). Y hace pocos meses hube de escribir el prólogo para el libro, de inminente aparición (J. M. Bosch, Barcelona, 2004), que recoge su tesis doctoral de la Universidad de Navarra sobre Rol social y sistema de imputación. El hecho de que ahora me encuentre ante el grato deber de escribir unas líneas introductorias a un libro del profesor Piña Rochefort sobre Fraude de seguros. Cuestiones penales y de técnica legislativa da cuenta de la capacidad de trabajo y de la amplitud de horizontes intelectuales de este joven penalista chileno.
El tema al que Juan Ignacio dedica ahora su inteligencia y su esfuerzo es una cuestión de Parte Especial, y de permanente actualidad. Las cifras del fraude de seguros son, en todos los países, elevadísimas. Sus repercusiones sobre las entidades aseguradoras y, en última instancia, sobre los asegurados, en cuyas primas repercute el incremento de la (fingida) siniestralidad, innegables. Así las cosas, no es de extrañar que exista un debate sobre el mejor modo de afrontar el problema, ya insistiendo en los medios de prevención fáctica, ya mediante el reforzamiento de los medios de prevención comunicativa (entre los que se cuenta, si bien de modo no exclusivo, la prevención a través del Derecho Penal). Éste es el objeto de análisis de la primera parte de la obra del profesor Piña, quien, mediante un agudo análisis de las características de los delitos patrimoniales y econó-
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FRAUDE DE SEGUROS
micos, nos pondrá de relieve la necesidad de un tratamiento especial del fraude de seguros, en cuanto delito contra el patrimonio con significativa trascendencia social.
A este respecto, en efecto, la discusión internacional se ha centrado en dos problemas: el primero, si el tipo de estafa es suficiente para hacer frente con garantías al problema del fraude de seguros o, por el contrario, debe ser completado con un tipo especial que sancione ya actos preparatorios de estafa; el segundo, si, acogida la innecesariedad o inconveniencia de la tipificación de actos preparatorios, debe, pese a todo, tipificarse el fraude de seguros como una modalidad cualificada específica de comisión de la estafa.
La...
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