Situación ocupacional y brecha de género, NESI 2014-2017
| Autor | Stefano Bruzzo G. - Carolina Grünwald N. |
| Cargo | Ingeniero comercial, con licenciatura en Ciencias Económicas de la Universidad de Chile - Ingeniero comercial de la Pontificia Universidad Católica de Chile y Master in Macroeconomic Policy and Financial Markets, Universidades Pompeu Fabra y Autónoma de Barcelona |
| Páginas | 14-18 |
Serie Informe Económica 274 14
4.1 Caracterización de hogares según
características del jefe/a de hogar
n esta sección se caracterizan y cuantican los
hogares según las distintas características demo-
grácas, educacionales y laborales de su respecti-
vo jefe de hogar. En el Cuadro 5a se muestran los
resultados para jefes de hogar hombre o mujer, mientras
que los resultados de los Cuadros 5b y 5c son para jefe
de hogar hombre y jefa de hogar mujer, respectivamente.
Todos ellos, separados por grupo decil de ingresos.
En primer lugar, se observa que más del 60% de los ho-
gares son encabezados por hombres. Tanto para hombres
como mujeres, la mayoría de los jefes de hogar tienen 65
años o más, y su nivel más alto de educación es la secun-
daria. En ambos casos, la mayoría de los jefes de hogar
son Ocupados, aunque en el caso de los hogares encabe-
zados por mujeres, están en un mayor porcentaje inactivas
(40,2% contra 20,0% de los hombres), evidenciando la me-
nor integración de la mujer al mercado laboral.
Correlacionado con el nivel de ingresos, la mayoría de los
jefes de hogar que no han recibido educación, o han lle-
gado a un nivel bajo de ésta, se encuentran en los deciles
de más bajos ingresos. Contrariamente, en los deciles más
altos se encuentran más jefes de hogar con educación
universitaria y postgrados, especialmente en el decil 10. Al
mismo tiempo, al descender el nivel de ingresos, aumentan
los jefes de hogar ocupados por cuenta propia y las perso-
nas dedicadas al servicio doméstico.
De la misma forma, jefes de hogar de ingresos mayores
tienen en su mayoría la categoría de Empleador y en
caso de ser asalariados, trabajan mayoritariamente en
el sector público. Sobre esto, el Cuadro 6 muestra cómo
ha crecido el porcentaje de jefes de hogar asalariados
empleados en el sector público, de un 16,6% en 2014 a un
18,4% en 2017, aumentando en más de 72.000 los jefes
de hogar que trabajan en el sector público. Esto, en línea
con los registros del INE del mercado laboral, donde los
E
4. SITUACIÓN OCUPACIONAL Y BRECHA
DE GÉNERO, NESI 2014-2017
asalariados del sector público registraron un incremento
importante en el período 2014-2017, sobre todo el último
año. Con todo, no solo aumentó el número de empleados
sino también sus salarios crecieron durante el período, de
acuerdo a la información recogida por la NESI.
4.2 Brecha salarial y nivel de ocupación
De acuerdo con la Encuesta 2017, de las 8.039.626 per-
sonas ocupadas, 55,8% correspondió a hombres, quienes
percibieron un ingreso promedio de $ 636.981. Las muje-
res, en tanto, correspondieron al 44,2% del total de ocupa-
dos y obtuvieron un ingreso promedio de $ 450.287.
La diferencia en el ingreso medio en 2017 se ubicó en 29,3%
en desmedro de las mujeres. Esta es la brecha más baja re-
gistrada desde 2014, cuando correspondía a 29,7%. El Grá-
co 4 evidencia que, si bien los salarios tanto de hombres
como de mujeres crecieron durante el período evaluado, la
brecha de ingreso medio entre géneros sigue estando pre-
sente y aumentó entre 2014 y 2016, alcanzando su punto
más alto en 2016 (31,7%), para luego disminuir a su valor
actual en 2017.
La brecha entre hombres y mujeres también se observa en el
nivel de ocupación. Del total de personas ocupadas, el 55,8%
son hombres, en contraste con las mujeres (44,2%). Al mis-
mo tiempo, más de la mitad de las mujeres ocupadas (52%)
recibe ingresos bajo la mediana poblacional. Por el contra-
rio, la mayoría de los hombres se ubica sobre la mediana de
ingresos y sólo un 48% de estos bajo ella (Gráco 5).
Cabe hacer presente que a partir de los datos presentados
no se puede inferir que hoy las mujeres estén recibiendo
ingresos menores al de los hombres por igual trabajo rea-
lizado. Ello escapa al ámbito del análisis aquí presentado
ya que para ello se requiere información más detallada en
cuanto a los trabajos efectivamente realizados.
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