Reglas fiscales versus instituciones fiscales
Autor | Carolina Grünwald N. |
Cargo | Ingeniero comercial de la Pontificia Universidad Católica de Chile y Master in Macroeconomic Policy and Financial Markets, Universidades Pompeu Fabra y Autónoma de Barcelona. Se desempeña como Economista Senior de LyD |
Páginas | 10-10 |
Serie Informe Económica 269 10
n principio existen dos instancias que se pueden
utilizar para alcanzar la anhelada disciplina scal:
reglas numricas e instituciones scalizadoras.
Las reglas scales imponen objetivos numricos que pue-
den tomar distintas formas: usualmente establecen límites
al balance presupuestario, o a la deuda o al gasto. Algunas
veces se combinan. Algunas reglas son anuales y otras
son de más largo plazo. En teoría, si estas reglas son bien
diseñadas y bien implementadas, deberían eliminar el ses-
go que tienen las distintas administraciones a aumentar
el dcit.
Sin embargo, en la práctica las reglas fallan. Esto, porque
además de que puede existir un manejo derechamente
irresponsable de las cuentas scales, ellas no pueden ser
completamente contingentes, pudiendo surgir situaciones
a partir de las cuales cumplir la regla simplemente sería
demasiado costoso (por ejemplo, en caso de crisis nan-
cieras internacionales o en caso de desastres naturales).
Por lo tanto, al diseñar las reglas se debe reconocer que
existe la posibilidad de incumplimiento de la misma. Una
solución para esto es establecer cláusulas de escape bien
denidas, las cuales debieran ser autorizadas por un agen-
te independiente5.
As, se necesitara una regla lo sucientemente flexible
como para prever contingencias, pero al mismo tiempo lo
sucientemente simple como para ser entendida, tanto por
quienes deben aplicarla, como por los ciudadanos, con un
claro trade-off entre flexibilidad y simplicidad.
Por el lado de las instituciones scalizadoras, cuyo rol es
“colaborar, a solicitud expresa del ministro de Hacienda,
en la discusión, análisis y emisión de recomendaciones en
materias relacionadas con la determinación del balance
cíclicamente ajustado”, es necesario que cuenten con un
mandato de largo plazo y con un staff de personas inde-
E
3. REGLAS FISCALES
VERSUS INSTITUCIONES FISCALES
pendientes del poder político y sin exposición a presiones
de grupos de inters.
Y si bien aún no está completamente clara la estructura
que debieran tener, es evidente que estos scalizadores ya
han realizado una contribucin tangible a la disciplina s-
cal, aportando al análisis y proveyendo diferentes puntos
de vista a la discusión. Sin embargo, aún sus recomenda-
ciones no conducen a acción. Con todo, su creación ha ido
aumentando en cada vez más países y organismos como
el FMI recomiendan su establecimiento.
De esta manera, nos encontramos con que tanto las re-
glas como las instituciones cumplen un rol y aunque sue-
len considerarse como soluciones alternativas, lo cierto es
que el hecho que ambas tengan atributos y limitaciones
sugiere que combinarlas sería de gran ayuda.
Como podría serlo un Consejo Fiscal, o el Parlamento.
5
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba